CRIPTA BLUE trae los clásicos riffs nebulosos a la nueva era con su primer álbum autotitulado. Un giro moderno en el sonido Stoner Rock probado a lo largo del tiempo, que tiene un gran impacto.
El trío de rockeros italianos añade un pesado toque Doom al blues psicodélico que sonaba muy bien en 1970 cuando BLACK SABBATH lanzó su primer álbum y que sigue sonando muy bien hoy en día.
"Mournin' Pire" se sumerge directamente con las guitarras difusas y un golpe de caja que da vida al álbum. El tono de las guitarras y el cálido sonido naturalista de la batería dan la impresión de que este álbum se grabó directamente en los años 70. La música llega como el humo, espesa y pesada, mientras baila en el aire con delicadeza. La canción se retira y nos deja sumidos en los tonos difusos del bajo y el eco del feedback, la banda construye la atmósfera de forma magistral con sus tonos y volumen in crescendo, construidos a partir de los instrumentos que están tocando, haciéndolo de forma natural y práctica.
Acelerando el ritmo, "Magickal Ride" tiene un bonito y rápido riff y una batería a la altura, la voz se acelera para igualar el sonido que recuerda a bandas post punk como The Smiths, pero con esos cálidos y difusos tonos de guitarra que lo hacen estrictamente CRIPTA BLUE. El solo de guitarra con sonido electrónico lleva la canción a nuevas alturas, y cuando la batería se desvanece hasta convertirse en ráfagas de golpes, y la guitarra entra y sale, me siento atraído por la atmósfera espacial y de realidad que esta sección ha creado. Volviendo al sonido de alta energía y ritmo rápido del principio de la canción, la sección central parece un sueño febril distanciado.
"Spectral Highway" rezuma misterio con su calmado y repetitivo toque de dedos y su ligera batería de Tom. La voz es algo más que un susurro y parece la banda sonora de un ritual cabalístico. La letra pinta una imagen de un desierto iluminado por la luz de la luna y la música encaja perfectamente con esta imagen. El ambiente psicodélico se rompe con el chasquido de una caja, y el silenciamiento de la guitarra se sustituye por poderosos acordes nebulosos y la batería se convierte en una fuerza de destrucción. Esta estructura se repite hasta el minuto final de la pista, donde vemos que la guitarra se convierte en una línea melódica que da la oportunidad perfecta para algunas guitarras aéreas y tiros en la cara, con la batería subiendo al doble de tiempo y lanzando algunos grandes rellenos.
El esfuerzo de CRIPTA BLUE por reunir elementos de Rock clásico y Stoner, Doom y Psicodélico se maneja sorprendentemente bien con este primer lanzamiento S/T que fluye a través de sus géneros inspirados con delicada facilidad, entregando una mezcla de sonidos en un regalo bien empaquetado para los oídos. La gran escritura de las canciones y la atmósfera evitan que las canciones de sonido similar se vuelvan repetitivas y la instrumentación proporciona niveles profundos de intensidad, groove y alma.
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