Esta es una banda polaca con un sello turco. Es increíble cómo el metal puede acercar a la gente. Lo que conozco de Turquía es el Kebab. Y Dios sabe cuánto me gusta esta comida (el turco de la esquina lo sabe seguro). Gloria a Turquía. Lo que conozco de Polonia es Vader, Velvet Thorns, Sear Bliss, Atrosis, Darzamat, Hefeystos, Sirrah (esos son grupos musicales, no comida). Y debe haber otros que puedo haber olvidado entre mi colección.
Nunca había oído hablar de Cemetery of Scream, a pesar de que existen desde 1995. Qué vergüenza. En realidad este es su tercer disco, sin incluir un MCD. En la biografía del grupo se dice que la banda ha sido aclamada en toda Europa por sus anteriores lanzamientos (Metal Hammer, Ablaze, Rock Hard, Aardshok). ¿Cómo es posible que una banda así haya acabado en un sello turco?
Comenzando su vida como un acto de Doomdeath, Cemetery of Scream hizo lo que muchos otros han hecho y añadió elementos de metal gótico a su fórmula ya original. Esto fue bueno y malo a la vez, ya que se volvieron aún más únicos por un lado y menos pesados por el otro.
La producción es escasa, pero funciona lo suficientemente bien como para que la banda transmita sus ideas. Las guitarras no son muy pesadas, pero fluyen bien. Las pistas y los solos son simplistas pero efectivos. Las guitarras suenan como si estuvieran afinadas de forma estándar. El bajo hace lo suyo aquí y allá, pero casi siempre sigue a las guitarras o a la batería.
La batería se ejecuta de forma impecable y mantiene las cosas interesantes en su mayor parte. Los teclados añaden la atmósfera cuando el resto de los instrumentos están rockeando. Son principalmente de fondo pero suenan bien.
Las voces son interesantes, por no decir otra cosa. El cantante aparentemente ha perdido algo de su destreza mortal, ya que sus gruñidos parecen forzados en comparación con las ofertas anteriores. Sus cantos limpios tienen un fuerte acento, pero esto no quita valor a la música.
Este es un álbum conceptual que tiene partes habladas al azar para ayudar a impulsar la historia. Esto es un problema ya que, por un lado, son aleatorias y, por otro, el dominio del inglés por parte del grupo es cuestionable.
La música es animada y rockera, con un toque definitivamente latino (que sorprendentemente funciona bien). El ambiente es entre sombrío y expresivo, mientras que parece que se contiene en algunos puntos. Es difícil no bailar con este álbum.
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