Ectoplasma - Spitting Coffins (320 KBPS)

 

Krucyator no es solo un sello que ofrece cosas nuevas y, a menudo, únicas para los fanáticos del metal con un gusto exquisito, sino que también intenta relanzar cosas interesantes que se han vuelto difíciles de conseguir. Un ejemplo de ello es el debut de los death metaleros griegos Ectoplasma. “Spitting Coffins” que se lanzó en el 2016, pero por lo que entendí, esta fue una salida independiente, por lo que es genial obtenerla por un precio razonable en CD. Desde entonces, Ectoplasma se ha ganado bastante respeto dentro de la escena, ya que representan un death metal de la vieja escuela sin concesiones, presentado con mucha pasión por el género.

Siendo una banda con poco menos de una década de formación (2012), los miembros saben exactamente cuál es el propósito de su música, no para intentar reinventar el género, sino simplemente para revitalizarlo, para llevar la fascinación de los días pasados ​​al presente, para hacer todo lo viejo nuevo de nuevo. Si bien, por un lado, este enfoque lleva automáticamente a algunas personas a gritar "imitadores", también tiene una cierta ventaja. Ectoplasma tiene una gran cantidad de cosas para mirar y aprender, y puedes ver que son verdaderos fanáticos del género, eligiendo muchos de los detalles positivos que lo hicieron tan famoso y querido.

Si bien no han excluido las influencias de las bandas europeas, diría que hay más similitudes con sus pares de Florida. El riffing parece ser muy tradicional, y el tempo a menudo se mantiene en campos de ritmo medio groovy. Hay suficientes ritmos explosivos y voces gruñidas aquí para satisfacer a cada purista, pero la plantilla del álbum ofrece una sorprendente porción de frescura, asegurándose de que las cosas nunca suenen demasiado anticuadas. Es el tipo de álbum que parece simple en la superficie, pero hay algunos sutiles matices que recompensan las múltiples escuchas.

Lo más destacado pueden ser los riffs perfectamente ejecutados, a menudo acompañados de algunas armonías solistas agradables y sorprendentemente pegadizas. Ectoplasma logra caminar por la delgada línea entre haber implementado suficientes ganchos y partes rectas, pero también algunos acordes que podrían darles un poco más de identidad propia. La percusión es como era de esperarse en este punto, a veces más dominante, pero siempre muy groovy al mismo tiempo. Las canciones son bastante cortas y muy ajustadas, llenas de todo lo que vas a pedir.

La producción es un poco áspera alrededor de los bordes y algo que han mejorado en sus siguientes salidas, pero sigue siendo adecuada y absolutamente útil. A los fans que les gusta el death metal crudo y descarnado les encantará el sonido de "Spitting Coffins". Así que, en general, siempre se puede cuestionar si álbumes como éste son esenciales. La respuesta para algunos probablemente sea no, pero parece que sigue habiendo mucho interés, y si estás entre los que siempre buscan más death metal de la vieja escuela de calidad, no puedes dejar pasar por alto esto.